Domingo 4 de marzo, 12 horas, en la Sala Ramon Romagosa
Música, danza y pintura (en forma de proyecciones) se dan la mano en esta pieza de danza clásica, interpretada por cuatro bailarines, especialmente creada para niñas y niños, con el objetivo de llenar un vacío en la escena familiar en nuestro país.
Espectáculo enmarcado dentro de la «Quinzena de Dansa Metropolitana».
Dirección y coreografía: Roser Muñoz y Joan Boix